martes, 3 de mayo de 2011

14 días de castigo, 23 sin ordeñarse

otro día de 12 horas de trabajo. se están acumulando y se dejan sentir. los ojos me pesan y me duelen, pero al menos no he pensado en mi situación durante todo el día. por las mañanas pude hablar con mi AMO durante unos minutos y fue lo más agradable de la jornada. hablar con El significa reforzarme, reafirmarme como esclavo, asegurar que el camino que estoy emprendiendo es el correcto, que voy en la buena dirección. está orgulloso de este sacrificio que estoy realizando mostrando mi sumisión y sometimiento. me alegra ver como algo negativo se ha convertido en positivo, en una forma de reforzar el control que tiene sobre este esclavo. de este proceso, que aún no sé cuánto podrá durar, sin duda su dominio sobre mi será más profundo, más radical, más firme. me dijo hoy una cosa que me llamó la atención. en un momento de la conversación me dijo que sabía que esto no podía durar, que tenía un final. es algo que aún no me planteo. ahí está la ironía. lo único que puedo decidir en este momento es si termino el tiempo de castidad o no, sabiendo que ese tiempo de castidad es una forma de sumisión y, por tanto de no tener control sobre mi vida. porque si dejara sueltos mis impulsos, mis instintos, mis apetitos, posiblemente en estos momentos, con tanta tensión y trabajo, estaría con la mano fija dándole que te pego, corriéndome por los rincones. sé que muchos leerán esto y que puede parecerles íntimo, pero este esclavo no tiene intimidad, sólo los límites de la prudencia que le ha impuesto su AMO. esto es una estocada contra mi ego, que aprenda que necesito a los demás, que necesito a mi AMO, que no soy nada sin Él.

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