ven aquí

una llamada de atención, una indicación de tu sitio, a veces es suficiente eso, y no es podo. los pies del Amo es el lugar del esclavo, sólo allí me siento plenamente yo, sólo allí me siento a gusto y en paz, sólo allí puedo desarrollarme como ser vivo, que no como humano, porque ya no deseo serlo. en la antigüedad los esclavos se consideraban como lo que son, objetos, un peldaño por debajo de los auténticos hombres. negación total de derechos, de capacidad de decisión, sencillamente debían obedecer.

mi AMO me ha llamado para que vaya, para que me sitúe a sus pies, pero no como algo coyuntural o momentáneo, me quiere allí siempre. como la llamada de una sirena no me puedo resistir, no hay forma de oponerse, no tengo voluntad para hacerlo. sencillamente voy y me acurruco a sus pies, respirando mi vida auténtica.